miércoles, 7 de noviembre de 2018

REFLEXIONES ACERCA DEL NAK


      En este post, los alumnos de Musicología del Conservatorio Superior de Música De Navarra- María Echegoyen, Asier Arizkorreta, Iker Puente-Vea e Iker Narbona- y el profesor Luis San Martín, nos escriben sus reflexiones acerca de la pasada edición del NAK.

     Una iniciativa que nace en el 2017 dentro de la asignatura Musicología Aplicada IV relacionada con los siglos XX y XXI, con el objetivo de que los alumnos adquieran la costumbre de asistir a espectáculos relacionados con la música de vanguardia y despierten su capacidad crítica.

      Desde el grupo de gestión del NAK y el CMC Garaikideak os agradecemos enormemente vuestro extraordinario trabajo y compromiso con la música de nuestro tiempo. Eskerrik asko!!



      Del 21 al 29 de septiembre de 2018, Pamplona se convertía por un año más en el escenario del Festival NAK de Música Contemporánea de Navarra. Con el objetivo de promover iniciativas que permitan el estreno y difusión de obras de música contemporánea en la Comunidad Foral y dar visibilidad a nuevos compositores e intérpretes, en esta cuarta edición el eje temático de toda la programación ha sido la música y su relación con el cine: sonido e imagen.

      La innovación ha sido la nota presente en todos y cada uno de los eventos que han conformado esta variada propuesta: desde estrenos de diversos autores, pasando por talleres de hardware musical y de nuevas grafías en la música de vanguardia, hasta la proyección de una película de cine mudo con una banda sonora compuesta especialmente para la ocasión y la interpretación de piezas corales de la música de cine sacadas de su contexto. Cinco encuentros diversos, originales e inéditos componían este festival que no ha dejado a nadie indiferente. 

      Con el objetivo de reivindicar la música contemporánea y de acercarla al público de la calle, una vez más el mencionado festival culminaba con aplausos y alabanzas con una respuesta de los pamploneses, y por extensión de los navarros, que confirman que la música contemporánea atrae, gusta y emociona.

      Ya falta menos para la quinta edición.

Alumnos de Musicología del CSMN


 Silencio, se rueda (21 de septiembre, CIVICAN)

NAK18 (Foto: Ana Domínguez)
     El 21 de septiembre del 2018, en Civican de Pamplona a las 19.30h, da comienzo al concierto inaugural de la cuarta edición del Festival de Música Contemporánea de Navarra. Este festival que durará hasta el 29 de este mismo mes, tiene como objetivo una vez más, acercar la música contemporánea a los pamploneses rompiendo barreras y estigmas y demostrando que cualquiera de nosotros puede ser capaz de escuchar, entender e interpretar esta música; la música de nuestro tiempo. 

     Un año más, se mantiene la idea de establecer un eje temático durante todas las actuaciones del festival, en esta ocasión son la música y el cine los que se convertirán en hilo conductor de todas las interpretaciones, donde una vez más se estrenarán piezas inéditas. Así pues, imagen y sonido fueron los protagonistas de un concierto en el que vimos y escuchamos seis piezas jamás antes tocadas.
La idea, creación e interpretación musical corre a cargo del Centro de Música Contemporánea (CMC) GARAIKIDEAK. Iniciativa cultural de carácter privado y sin ánimo de lucro, creada en 2010, su misión se basa en componer, interpretar y promover la difusión de música contemporánea de nueva creación.

      El Coro Fundación Atena, que una vez más colabora con el festival NAK, se encargó de dar voz y poner sonido a las obras, guiados por un director y sin partitura alguna. Con chasquidos, susurros, gritos y demás sonidos, fueron ellos quienes pusieron voz y dieron vida a las imágenes que al mismo tiempo se proyectaban.

     El periodista y cineasta pamplonés Oskar Alegria Suescun ha sido el encargado de crear las silenciosas imágenes, que no mudas, a las que los compositores del CMC Garaikideak les han puesto música. Así, cuatro de las seis obras se convirtieron en una perfecta fusión de imágenes y sonido, mediante la cual nos transportaron a la historia que contaban.

     La fuerza e intensidad de un txistu y un tamboril sirvieron de introducción a la segunda pieza titulada “Zaldidantza” en la que las imágenes reflejaban, como bien dice el título, el baile de unos caballos. La obra “Anemic Time” que nos habla del círculo del tiempo, para continuar con el “Interludio”, una vez más con txistu y tamboril.
Así, en la segunda parte, disfrutamos de la obra “Gaua Itsasoan” con imágenes de un barco surcando el mar al anochecer, para terminar con “La lengua de los dioses”, en la que la naturaleza ha sido la protagonista.

     “Silencio, se rueda”, título de este primer concierto, nos ha demostrado cómo diferentes elementos sin aparente relación entre sí, pueden crear algo tan maravilloso y sorprendente: el arte. La fusión de instrumentos clásicos del siglo XVII, instrumentos folklóricos autóctonos, sonidos que nosotros mismos reproducimos en nuestra vida cotidiana, una mesa de mezclas electrónica y un conjunto de imágenes dieron lugar a una experiencia innovadora que no dejó a nadie indiferente.

      Rompiendo con el estricto protocolo que los músicos siguen al actuar de negro; vimos a los intérpretes vestidos completamente de blanco. Quizás como reivindicación de una nueva música, una nueva propuesta y un nuevo formato de concierto; o quizás como homenaje a la frase proyectada en una de las películas: “Porque la naturaleza interroga siempre vestida de blanco...”

    Arropados por un público diverso, se podría decir que se ha cumplido con una de las misiones: enseñar la música contemporánea al público y demostrar que no es un cúmulo de sonidos sin sentido, sino una historia, un cuento o una película que todo aquel quien tenga interés puede disfrutar. Es posible un cine con creaciones musicales propias de nuestro tiempo y es hora de ir sustituyendo las clásicas bandas sonoras que dieron sus primeros pasos a finales del siglo XIX con el fonógrafo, por la variedad de movimientos artísticos que hoy constituyen la música contemporánea.

     Que estas iniciativas sirvan para impulsar la música de vanguardia en nuestra ciudad de Pamplona; al fin y al cabo, es nuestra música y nuestra creación, no la de nuestros antepasados. ¿Y quién mejor para escucharla que nosotros mismos?

María Echegoyen


Apokalypsis, errebelazio baten sinbolo (22 de septiembre, Baluarte)

NAK18 (Foto: Ana Domínguez)
     Al igual que otras ediciones, Baluarte ha abierto este año sus puertas al Festival de Música Contemporánea de Navarra (NAK), con un claro objetivo: apostar por el talento local e incentivar el acercamiento de la música contemporánea al público navarro.

       En esta ocasión el foco residía en el nexo entre cine y música contemporánea, y cómo la unión de ambos elementos tiene como resultado la creación de un “todo” artístico. En pocas palabras, pretende demostrar que la utilización de bandas sonoras ya forma parte del recuerdo, y que debemos apostar porque los proyectos cinematográficos actuales vayan de la mano de las nuevas corrientes compositivas.Y es que, ¿por qué si el proyecto cinematográfico es nuevo no puede serlo también su acompañamiento musical? 

      La labor musical corrió a cargo de Ensemble Kuraia, agrupación musical fundada en 1997, y que dispone de un conjunto profesional de excelente calidad para la preparación y difusión de obras de compositores actuales. Dicha calidad se manifiesta en su participación constante en festivales y eventos de toda Europa y América Latina, como la Temporada de conciertos de Rondó, la Universität der Künst y Hochschule für Musik de Berlín o el FIMCC de Lima entre muchos otros. Además, la agrupación también colabora con diversos proyectos de difusión y pedagógicos con el Klangzeitort de Berlín o el Museo Guggenheim de Bilbao. En definitiva, una apuesta segura para cumplir las altas expectativas de este festival.

       El programa estaba organizado en tres obras artísticas, que si bien de distinta temática, mantenían perfectamente el hilo cine-música contemporánea. El evento quedó inaugurado con una breve presentación de las tres obras, dos de las cuales fueron explicadas pòr las propias compositoras, todo un acierto por parte del evento.

       La primera obra fue Mal(in)con(i)ci de la compositora Sonia Megías, con vídeo de Paola Boioli y música para flauta, clarinete, violín, violonchelo y piano. Mal(in)con(i)ci (juego entre las palabras italianas malconci y malinconici, maltrechos y melancólicos) nos presenta tres texturas sonoras distintas, las cuales pretenden enfatizar el uso tríptico de los colores en la representación visual.

    La segunda proyección fue Apokalypsis, errebelazio baten sinbolo, de la compositora María Eugenia Luc, fundadora y actual directora artística de Ensemble Kuraia.  El libreto, íntegramente en euskera, ha sido realizado por la propia compositora y el poeta guipuzcoano Juan Kruz Igerabide. Esta obra es una reinterpretación personal del libro del Apocalipsis de San Juan, pudiendo así realizarse visiones simbólicas de eventos actuales o pasados como síntomas de la destrucción humana y de la naturaleza de las que el propio ser humano es responsable. Un planteamiento cuanto menos interesante que pretende que el espectador se pare a pensar en su propia conciencia.

      Por último, pero no por ello menos interesante, éramos testigos de la interpretación de la obra Un soplo que vacía el pecho de Sergio Blardony sobre textos de Pilar Martín Gila. En esta, se nos presenta en un panorama puramente musical un elemento simbólico evidente: el rugido de un león, que se escucha mientras el cuidador del zoo intenta salvarlo de la guerra humana. Esta obra creó una atmósfera única e intimista, que paralizó por completo al público por su profundidad y crudeza.

      En definitiva, este evento ha servido no sólo para mostrar la posibilidad de un cambio musical en el panorama cinematográfico sino también su necesidad. Tal vez, y para siguientes ediciones, queda pendiente un objetivo: crear un interés real en el público general.

Iker Puente-Vea


El fantasma de la ópera (27 de septiembre, Filmoteca de Navarra)

NAK18 (Foto: Ana Domínguez)
    Acudí con algo de antelación a la Biblioteca de Navarra, ya que ese día (27 de septiembre, jueves), en el marco del Festival de Música Contemporánea de Navarra NAK, iban a proyectar en la Filmoteca de Navarra la versión de 1925 de “El fantasma de la ópera”, la primera adaptación cinematográfica conservada (hubo otra en 1916, pero no ha llegado a nuestros días) de la famosa novela escrita por Gastón Leroux en 1910. 

     Pero esa proyección no iba a ser como la original, sino que iba a estar acompañada con el estreno de una nueva banda sonora creada especialmente para la ocasión. Música de vanguardia para un clásico del cine mudo. Tradición e innovación, como es de costumbre en el Festival NAK, en el que el eje temático de la presente edición es la relación entre la música y el cine.

    Con el aforo de la Filmoteca de Navarra (176 butacas) prácticamente completo, el evento comenzó puntual, a las 20:00, cuando uno de los organizadores tomó la palabra para contextualizar brevemente el cine mudo y dar una breve explicación de lo que el público iba a ver y escuchar. Como dato curioso de su intervención, el estreno de esta película en Pamplona se dio el 16 de abril de 1926 en el Teatro Gayarre, y a él, según explicó el ponente, es posible que hubiera acudido a tocar el sexteto de Aramendia, de Cervantes o de Larra, activos por aquel entonces. 

    La banda sonora para aquella ocasión, claro está, fue muy diferente a lo que íbamos a escuchar las personas allí presentes. Tras esta breve introducción, dio la palabra a los creadores de la nueva banda sonora de la película, Hilario Rodeiro e Ignacio Fernández, integrantes del dúo NYCK, que resumieron el proceso de creación y grabación de la música, en el que también colaboraron algunos alumnos del Conservatorio Superior de Música de Navarra y del CTL FP de Imagen y Sonido.

   Finalizada la presentación, el público aplaudió y se hizo el silencio. Entre toses y carraspeos se apagaron las luces y comenzó la proyección. Las disonancias en los créditos iniciales fueron el augurio de que la antigua película no iba a contar con una banda sonora a la vieja usanza. En los 92 minutos que duró la proyección, se combinaron grabaciones de instrumentos clásicos (piano, instrumentos de cuerda, flauta, clarinete y acordeón), con interpretación en vivo de música electrónica, instrumentos de percusión y, aunque de manera anecdótica, de una tuba. 

    En ocasiones, la música parecía acompañar a la escena, reforzando lo que las imágenes querían transmitir, mientras que en otras las imágenes y el sonido no daban ninguna sensación de concordancia, causando de esta manera cierto desconcierto, que bien podía ser (o no) intencionado. 
No obstante, la constante de esta proyección audiovisual fue la angustia que la música en todo momento transmitía, una angustia que cobraba sentido con el argumento de la película.

   Cuando la proyección terminó, las luces se encendieron y, como el protocolo dicta, el público aplaudió. Aún se podía apreciar la cara de susto en algunos asistentes a los que sin duda les pilló por sorpresa esta innovadora experiencia musical, mientras que otros volvieron a casa satisfechos por lo que habían visto y oído. Y en el fondo de todas esas sensaciones, una reflexión: la gran importancia de la banda sonora en cualquier película (ni que decir en las de cine mudo) y la certeza de que con otra música el significado de la película cambiaría de manera más o menos significativa para los espectadores.

Iker Narbona

La luz de Dreyer (28 de septiembre, Civivox Condestable)

NAK18 (Foto: Ana Domínguez)
   
     Gracias al NAK el viernes de la última semana de septiembre tuvo lugar algo que no se suele ver muy a menudo. Y es que, en la ciudad de Pamplona, tuvimos la ocasión de escuchar una conferencia del compositor Sergio Blardony sobre las obras que se iban a interpretar, e incluso estrenar, esa misma tarde en el patio del Condestable. Además, estuvieron presentes tanto la poeta que escribió el poemario “Ordet” Pilar Martín Gila, sobre el que se inspiró el compositor para la primera obra, como la videocreadora de “Disembodied” Marta Azparren, sobre la que se inspiró para la segunda obra.

     El compositor en actitud muy cercana nos habló de sus dilemas a la hora de utilizar la voz en sus obras, del legado de los vanguardistas del s. XX, del uso y la importancia de la multidisciplinaridad, del por qué de las obras, así como de claves para entender y sentir la obra. La música actual de vanguardia está siendo explicada al público que quiera conocer los detalles de la obra, y lo más importante: comprenderla. De esta manera no parecerá que público y artista pertenezcan a universos distintos, si no que la palabra y la información servirán de catalizador para la convergencia en una estética actual y vanguardista.

    Es muy significativo que la charla tuviese una duración de una hora, pues la obra en sí tiene una duración parecida por lo que se puede asegurar que fue una charla profunda y con una intencionalidad de explicar bien el trabajo que se iba a exponer dos horas más tarde.
A pesar de la gran oportunidad que suponía esta charla/presentación apenas acudieron 15 personas en total a un lugar preparado para más de 70 personas. Esto nos dice mucho sobre el panorama y la actitud de querer comprender del público de hoy en día. Quizás también era mucho pretender tener a la gente presente de 18:00 (hora de inicio de la charla) a 21:00 (hora de finalización de la obra) en Condestable, pero al menos se dio la oportunidad de conocer y escuchar al compositor.   
   
   El concierto estuvo presentado por las personas organizadoras del NAK, las cuales hablaron, entre otras cosas, de la necesidad de reivindicar la música y cine de autor. La organizadora terminó la presentación y dio paso a la obra con una frase muy certera y apropiada para el momento que decía: “La vanguardia no solo artística, sino también de pensamiento es la que nos permite mirar al futuro.”

    La obra comenzó jugando con la incertidumbre misma de sí había comenzado, pues las luces se apagaron y aparentemente no ocurría nada. Sin embargo, sí que estaban ocurriendo cosas solo que no delante del público si no por el edificio. El autor siendo coherente con su discurso a la hora de adaptarse al lugar, hizo que la actriz recorriera los pisos del Condestable aprovechando así el potencial del espacio. 

    También se vio reflejado en la puesta en escena la teoría que proponía el autor sobre la centralidad en el escenario de las personas intérpretes, ya que estas siempre están en el centro y si hay una propuesta de vídeo siempre se queda de fondo. En este caso, el vídeo estaba en frente del público y los instrumentistas a los lados del público o incluso en otro piso.

     Se pudieron apreciar muchas ideas y propuestas que el autor había explicado en la charla, como por ejemplo el registro exclusivamente grave y agudo de los instrumentos con la idea de evitar generar un cuerpo sonoro más sólido.

    La obra duró algo menos de una hora, sin embargo, hubo mucho público que por un motivo u otro abandonó el lugar durante la representación. Es duro ver como después de tanto tiempo invertido y tanto esfuerzo dedicado, entre otras cosas para que sea gratis, haya personas que decidan no enfrentarse a algo nuevo y actual. 

   Como músicos, organizadores, compositores etc. tenemos la tarea de descubrir cómo hacer llegar estas nuevas estéticas al público de ahora, y como lograr que se queden. Pero como público, también tenemos la responsabilidad de generar y darle lugar a la lucha interna entre lo que sabemos que nos gusta y estamos acostumbrados frente a lo nuevo, lo de esta época y lo que nos debería hacer sentir que estamos en el presente.

    Estas nuevas propuestas musicales serán aceptadas, valoradas y disfrutadas en el futuro de una manera más popular sin duda. La cuestión es que tenemos la posibilidad de hacerlo ahora, de disfrutar con la realidad que se genera ahora mismo, podemos no dejarlo para el futuro. Como decía el poema de Pilar Martín Gila interpretado en la obra “La luz de Dreyer”: “Nada detiene el paso de lo real.”

Asier Arizkorreta

jueves, 2 de agosto de 2018

NAK 2018 FESTIVAL DE MÚSICA CONTEMPORÁNEA DE NAVARRA / NAFARROAKO MUSIKA GARAIKIDEAREN JAIALDA


El Festival de Música Contemporánea de Navarra / Nafarroako Musika Garaikidearen Jaialdia, NAK 2018, presenta su cuarta edición, que va a tener lugar en Pamplona, del 21 al 29 de septiembre de 2018.
NAK es un evento motivado por la necesidad de promover iniciativas que permitan el estreno y difusión de obras de música contemporánea en la Comunidad Foral, así como de apoyar a compositores e intérpretes locales. Tras la buena aceptación de anteriores ediciones, nuestro objetivo sigue siendo consolidarnos como un punto de encuentro entre creadores y público en el que confluyan música, creación, pensamiento estético, así como un enfoque didáctico en todas las actividades.
El festival, promovido por el Centro de Música Contemporánea Garaikideak, y organizado conjuntamente con la Red Civivox del Ayuntamiento de Pamplona, cuenta en su cuarta edición con la colaboración del Gobierno de Navarra, INAEM, Fundación Caja Navarra, Filmoteca de Navarra, Fundación Baluarte, CTL FP Imagen y Sonido, Arión, Conservatorio Superior de Música de Navarra, Conservatorio Profesional “Pablo Sarasate”, Asociación de Musicología de Navarra y Fundación Atena.


La programación de NAK 2018 contempla un programa multidisciplinar integrado por talleres, presentaciones y conciertos, varios de ellos con obras inéditas, reforzando los objetivos planteados en anteriores ediciones.
El festival mantiene la idea de establecer un eje temático como nexo de unión de la programación que tiene especial relevancia en esta edición, ya que todas las actividades tomarán como punto de partida la música y el cine, presentando varias propuestas que analizarán, desde la perspectiva de la creación e interpretación, la utilización de la música de vanguardia en relación al medio cinematográfico, tratando diversos aspectos que rodean la ambientación musical en relación con la imagen; promoviendo, además de la difusión, creación e interpretación de música contemporánea, la creación cinematográfica.

ESPACIOS: Civivox Condestable, Civican-Fundación Caja Navarra, Filmoteca de Navarra, Baluarte, Conservatorio Superior de Música de Navarra y CTL FP Imagen y Sonido.
FORMACIONES: Ensemble Garaikideak, Coral Etxarri Aranatz, Ensemble Kuraia, Nyck y Fundación Atena.
COMPOSITORES INVITADOS: Sergio Blardony y Philippe Laval.
REALIZADOR INVITADO: Oskar Alegría Suescun.
SOLISTAS: Andrés Gomis, Dorota Grzeskowiak, Uxue Roncal y Javi Pérez.
COLABORADORES: Alicia Torrea, Prado Pinilla, Marta Azparren, Alberto Cañada,  Asociación de Musicología de Navarra, Asociación Befaco, CTL FP Imagen y Sonido.


jueves, 8 de marzo de 2018

HEGO HAIZEAK EN EL CICLO "MIRADAS DE CULTURA CONTEMPORÁNEA"




  
Dentro del ciclo “Miradas de Cultura Contemporánea”, promovido por el Ayuntamiento de Pamplona, tendrá lugar el concierto de la Banda de Txistus HEGO HAIZEAK.  

El concierto, que tendrá lugar el viernes 16 de marzo a las 19.30h. en el Civivox San Jorge, es una propuesta multidisciplinar que aúna música y videoproyección, y que tiene, como eje central, la música contemporánea escrita para txistu, que estará acompañado de electrónica, acordeón e instrumentos de percusión.

El programa, de estilos diversos, aborda desde la música tonal hasta la música más vanguardista, y se interpretarán obras de Joaquín Lecumberri, Hilario Extremiana, Maria Eugenia Lluc, Joxean Llorente, e Urtzi Iraizoz, Además, destacan dos obras del compositor y director Rodrigo de Santiago.
  
La Banda de Txistus Hego Haizeak está formada por los músicos Xabier Olazabal, Aitor Urquiza, Ainara Martínez -integrantes del Centro de Música Contemporánea Garaikideak-  Karlos Peñaranda y Beñat Lopez en la parte musical; y el videocreador Iker Oiz en la parte visual.


       PROGRAMA

        -Honai - Hilario Extremiana
                           -Hiru gutixi - Urtzi Iraizoz
                           -Suite Atlántica - Joaquín Lekumberri
                           -Nocturno y Final - Rodrigo de Santiago
                           -Fantasía Homenaje - Rodrigo de Santiago
                           -Zugarramurdi - Urtzi Iraizoz
                           -Zargan - María Eugenia Lluc
                           -5 Apuntes para txistu - Joxean Lorente